Dice Evo Morales que la corbata es el símbolo de la clase dominante. Y es cierto. Las veces que usé esta prenda sentí que dominaba la situación. Y me sentí inseguro.
Y en la ciudad de arena, a veces el mar se nos acerca. Como esponjas eléctricas va cayendo la nieve. Y vienen barcos desde lejanos tsunamis, rotas las amarras. Arañando escápulas maderas, la mano del viejo buscó entre cuaderna y cuaderna. El ojo del viejo coincidió con el ojo del barco, y este naufragó cerca del cero, justo cuando el anciano conseguía extraer una astilla de madera, para tapar una muela pocha. La ciudad llora.
Y ella pone un anuncio en EP3 (El País. 16.9.05):“Busco arqueólogo para descifrar una medalla con 49 números sobre la ubicación de Venus. Pieza única".
No leí nada más bello.
Un 10% de los españoles no sabe lo que es Internet. Yo soy uno. Si me preguntan no se explicarlo.
¡Ah, al principio, muy al principio, ese en el que dios decidió democráticamente (estaba sólo) llenar de agua todos los hoyos que le habían quedado de su chapucera tierra, (mares) si quería que fuera redonda y no una paparrucha, en ese principio, mucho antes de que existieran los alcaldes y los concejales, y la orgánica democracia burguesa (técnica para llenarse los bolsillos los ricos con el visto bueno de los pobres) pues eso, que mucho antes de todo lo anterior, según la ciencia, nuestra cabeza actual sólo era una boca con un grupo de células nerviosas que nos daba aspecto de transparente gusano chupón o sanguijuela, y que más tarde darían paso a toda esta cabezonería, que comunica lengua con estómagos agradecidos. Conclusión: si el hombre no comiera, (parásito) no existiría Obama. Ni Cristóbal Colón. Ni la orgánica democracia burguesa. Ni alcaldes, ni concejales. Y seriamos una anémona eterna y joven nadando entre dos aguas, como una mariposa acuática. Sin tener que agradecer nada a nadie. Pero hubo un fallo, y a aquella célula le salieron dientes.
El córtex. El límbico. El cerebro de reptil. Tres cerebros. La inteligencia reside en el córtex. Las emociones primarias, como el fanatismo, las creencias, en el segundo. Los instintos básicos: sexo, hambre, sed, en el tercero. Comienza a desarrollarse uno nuevo, el cuarto está en la frente. Este es la causa del aumento de cesáreas. Cuando no podamos salir, nuestra inteligencia estará conectada por el cordón umbilical con nuestra madre y ya viviremos por fin en el útero eternamente, que es lo que siempre perseguimos cada vez que follamos. No tendremos hermanos. Ni hermanas.
Escuché en la radio esta palabra a un comentarista deportivo: Candidatable. Decía que era ese que quiere presentarse a las elecciones. Pero con pocas posibilidades. Con ese nombre , no me extraña. A mí cuando escucho estos palabros el córtex me da un respingo y busca un clavo ardiendo para salvarme del ruido. En esta ocasión el cortéx me sopló una palabra limpia: Marmara. Mar de Marmara.
Las distancias no deberían recorrerse con tanta facilidad, con tanta impunidad. Hay algo sagrado (¿qué misterio?) que se viola cuando las distancias se acercan tanto y en tan poco tiempo. Suelo terminar con dolor de cabeza, producto de un vértigo un tanto indolente ante la distancia: 800 kilómetros en tres horas. ¿Y el resto del paisaje, dónde quedó? Pasamos sobre él como si no existiera. ¿Dónde su importancia?
Lo único que no he tenido que estudiar, que aprender, es la ignorancia. Ella me rodea con naturalidad, es mi más fiel compañía. En mi caso, en este caso, la literatura tiene un problema: se enfrenta a un ignorante. Y nunca le tuve miedo. Ella lo sabe. Y va dejando disimuladamente un reguero de letras. Yo cojo algunas. Pero existen pájaros. De tal forma, cuando no puedo completar una palabra, coloco un pájaro. Él sabrá la letra que se comió. Así la palabra que invento nace con posibilidades de volar en una lengua extraña.
El orín de los perros, las afueras de Viznar. El 19 de Agosto del 36, al amanecer. Mi propio destino, otro amanecer del día 19 de Enero, tan sólo quince años más tarde. Pobre Luis Rosales. Pobre Trescastro de Medina. Pobre Federico. Pobre España. Pobres los españoles. Qué triste murió Cernuda.
Cuando una mujer (joven) se acuesta contigo es que le importas un carajo. Esa es la conclusión que saco de esta respuesta. A la pregunta:”SUELES TENER SEXO EN LA PRIMERA CITA”, Adriana Cereijo de 18 años, estudiante de Bellas Artes de Madrid, responde:” Depende de la persona, aunque si empiezas a hacer sexo en la primera cita se puede convertir sólo en eso. Si el otro me importa de verdad, no lo hago, creo que así resulta más bonito” -EP3 (El País) 18.8.06.
Esta joven se parece a mis padres. Los hijos siempre recuperan la figura de los abuelos como imitable. Si esta joven es mi hija, mis nietos serán cojonudos.
Esta joven se parece a mis padres. Los hijos siempre recuperan la figura de los abuelos como imitable. Si esta joven es mi hija, mis nietos serán cojonudos.
Si hace cinco o seis años, hubiera encontrado estos ramilletes, habría sufrido menos. Hoy, en cambio, me hacen sufrir más.
ResponderEliminarLe dejo éste a la ciudad de arena:
http://www.flickr.com/photos/33912463@N05/3247348092/
"Pero existen pájaros. De tal forma, cuando no puedo completar una palabra, coloco un pájaro. Él sabrá la letra que se comió. Así la palabra que invento nace con posibilidades de volar en una lengua extraña."
ResponderEliminarÉsta es la Poética, LA ÚNICA. Todo lo demás es artesanía de la palabra. Tiene su mérito, pero no el del Arte.
Antes me quedé triste, ahora río de felicidad, y a carcajadas de alegría.
Bendita sea la ciudad de arena.
Totalmente de acuerdo, Sofía.
ResponderEliminarLA ÚNICA.
Me gusta lo que escribes.Me lo paso bien leyéndote. Un beso y una ramita de romero para variar.
ResponderEliminarLoli me estás poniendo el jardín a tope.
ResponderEliminarBesos.